¿Se pierden vuestros apellidos?
A raíz de artículo : https://www.gciencia.com/historias-gc/21-000-apelidos-galegos-vias-de-extincion/?fbclid=IwAR2fRwKE_4LSDQ7jhhG3yuLplJdQSt4fhtESPB1M33bX97GdWboLf8FXMOA
me puse a pensar en mis apellidos: Somos la última generación de "Bello". (De momento no nos afecta el posible cambio de orden en los apellidos...)
Mi abuelo paterno fue el único varón de los hermanos que se casó y tuvo hijos; mi padre fue el único hombre de sus hermanos que tuvo un hijo varón PERO él, mi hermano, sólo tuvo una hija. ¡Allá va el apellido!... por nuestro lado ¡desapareció!.
Por el lado materno, de momento, hay más "suerte". Mi tío tuvo un hijo varón que ya tiene dos hijos, también varones, que mantienen el apellido.
¿Tenéis algún caso en el que desaparezca alguno de vuestros apellidos? ¿Sois, como yo, los últimos "portadores"?...
Es una sensación... "rara"...
Respuestas
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Hola Berta,
sí, me identifico con tu historia.
Yo soy la última portadora del apellido Marqués Medrano (al menos por lo que he visto).
Lo que me parece interesante es cómo se van generando nuevos apellidos según las resoluciones de los países en las diferentes épocas.
Cuando mi abuelo llegó de España a Argentina, a principios del siglo pasado, tenía un apellido doble, como se usaba allí > la suma del apellido paterno y del materno (Marqués + Medrano).
Luego, como en Argentina se ponía a los hijos solamente el apellido del padre, el apellido doble de mi abuelo paterno se transformó en un solo apellido, pero compuesto > Marqués Medrano (esto no era nada común en Argentina y en los trámites administrativos era una complicación).
Solamente los descendientes varones podían transmitir apellido. Durante un largo tiempo se mantuvo así en el siglo XX.
Las mujeres agregaban a su apellido de solteras -al casarse- un "de" y el apellido del marido, pasando a ser la mujer "de XX".
La hermana de mi abuelo se casó y vivió en España. Según las leyes allí vigentes, el apellido también se modificó para sus hijos.
Mi abuelo tuvo 3 hijas mujeres y un varón (mi padre).
Actualmente las leyes en Argentina son otras. Yo no tengo hijos. Soy la última del linaje.
No es grave.
Nada se pierde, todo se transforma.
Y como las leyes siempre cambian... quién sabe... los Bello y tantos otros tendrán muy probablemente su continuidad 🙂
Saludos,
Carla
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¡Gracias por la respuesta, Carla!
Estoy completamente de acuerdo en que no es nada grave. Como comenté, al leer el artículo me sorprendió y fue cuando me paré a reflexionar... ¡mi apellido era uno de esos!...
Unos se quedan por el camino y otros entran en las familias... ¡siempre aprendiendo!...
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Mi bisabuelo José Bamio tuvo 10 hijos pero actualmente,
3 generaciones más tarde, solo quedan 3 Bamio varones, y una generación más adelante, solo hay dos. Sé que hay unos Bamio en Pontevedra, y que debemos estar relacionados vía Marín, pero me falta investigar más.
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